El suceso tuvo lugar a las 6:30 horas, en el Puesto de Control de Campo Alegre, ubicado en la Ruta Nacional 9.
Durante la realización de sus labores, los efectivos de Gendarmería Nacional detuvieron una camioneta Renault Kangoo a fin de corroborar de que el conductor contara con todos los papeles necesarios para poder seguir circulando, sin embargo, se toparon con algo que los dejó atónitos.
Cuando el vehículo se detuvo, los guardianes del orden notaron que del mismo emanaba un olor putrefacto, por lo que le pidieron a los ocupantes que se bajaran y abrieran el rodado para así poder inspeccionarlo, y allí se encontraron el asco.
En la parte de atrás, los sujetos llevaban 10 cerdos y 2 llamas, todos los ejemplares faenados y en estado de descomposición debido a que no contaban con cadena de frío ni medidas de saneamiento.
Además, tampoco contaban con ningún tipo de documentación que habilite el transporte de dicha carga, por lo que solicitaron colaboración de la División Policía Rural, quienes secuestraron los 90 kilos de producto cárnico.
Una vez retiraron los ejemplares, procedieron a labrarle las infracciones pertinentes a los ocupantes de la Kangoo, quienes tenían 71 y 44 años.
