El Dr. Mario Rolando Rosillo fue el único testigo que compareció hoy en la audiencia del juicio oral que se le sigue a nueve personas, que están sospechadas de tener relación con el secuestro y crimen del niño Mario Agustín Salto.
El extenso cuestionario que respondió, quien es comisario retirado de la Provincia de Corrientes y adiestrador canino, estuvieron vinculadas con la forma en que los perros adiestrados pueden seguir rastros, localizar personas u objetos.
Sobre el particular, se explayó sobre el campo de la odorología forense, como especialidad investigativa en casos policiales-judiciales, así como también en el rescate de personas en situaciones de emergencia.
Cabe apuntar que el profesional fue propuesto por alguna de las defensas técnicas de los imputados, las que solicitaron que se le exhibieran los videos de los procedimientos realizados con los canes K9 en Quimilí. Las fiscales se opusieron a esta medida y el Tribunal resolvió que ese material audiovisual podrá ser oportunamente proyectado en la sala, pero no hoy.
Por otra parte, los magistrados y las partes escucharon ayer el testimonio del policía rionegrino Marcos Herrero, quien actuó en la investigación del hecho criminal.
Su exposición se extendió algunas horas en la sala de audiencias, en la que detalló los procedimientos que efectuó como guía de los canes de la División K 9, en diferentes domicilios quimilenses.
Asimismo, explicó cómo fueron entrenados y de qué manera hicieron su labor los perros llamados Duke y Halcón.
