Una joven estudiante quiso darle una bienvenida sorpresa a su novio policía. Preparó un agasajo especial y se dirigió hacia la terminal. El efectivo había viajado días atrás para descansar. Pero la sorpresa terminó llevándosela ella, cuando encontró a su novio junto a otra persona.
Lo que debía ser un momento de emoción, fundido en besos y abrazos luego de no haberse visto durante varios días; terminó siendo un verdadero escándalo en medio de la terminal de ómnibus Néstor Kirchner de la ciudad Capital.
Eran aproximadamente las 18.30 de anteayer, cuando una joven de 22 años residente en La Banda tomó una motocicleta y les dijo a sus familiares que “iba a recibir a su novio que llegaba de viaje”. Los despidió entusiasmada y con gran alegría para recibir a su pareja, que regresaba de unos días de descanso desde la provincia de Tucumán.
Ingresó a la terminal que se encuentra ubicada en avenida Roca de la ciudad Capital. Vio pasar a los pasajeros de los demás colectivos que llegaban. Hasta que finalmente, vio a su novio.
La pareja de la joven es un agente de Policía de 24 años, residente también en la ciudad de La Banda. En ese momento, la joven estudiante se percató que el agente no estaba solo. Había llegado con una mujer.
De inmediato, estalló en ira. Se acercó al policía y a la acompañante, y comenzó a insultarlos. Le cuestionaba la situación, por lo que el efectivo aducía que “se trataba de una compañera de la universidad”. Mientras trataba de tranquilizarla.
Pero la joven estaba completamente fuera de sí y no entendía de razones, ni escuchaba las explicaciones de su novio que llegó junto a otra mujer. Les propinó golpes de puño en el rostro y luego, usando el casco que tenía en sus manos, comenzó a golpearlos. La situación fue advertida por los demás turistas quienes alertaron a la Policía sobre el escándalo que se estaba desarrollando en el hall de la terminal. Ante la presencia de los efectivos y del personal de seguridad privada del lugar, la mujer dijo que “estaba alterada ya que había descubierto a su novio con otra mujer”. Mientras lo acusaba de serle infiel. Por su parte, el funcionario policial, intentaba calmar los ánimos aduciendo que “era un mal entendido” y que “ellos solo eran amigos y compañeros de la facultad”. Por el estado de nerviosismo de la joven bandeña, la tranquilizaron y trataron de brindarle asistencia médica, pero esta se negó manifestando que “se encontraba bien”. Mientras que al otra mujer, se negó a ser identificada y a brindar alguna información al personal actuante durante el incidente.
