Leandro Nahuel Bravo conocido como “Toro”, le había jurado a la familia Ruiz que “apenas encontrara a ‘Gringuito’, lo iba a matar”. Estaba enojado, porque Héctor José Ruiz había ingresado a la casa de un familiar y le robó pertenencias. Su promesa, la cumplió.
Cerca del mediodía del pasado jueves, Ruiz de 28 años residente en el barrio El Tuscal de la ciudad de La Banda caminaba por Calle Pública del barrio La Isla junto a un allegado, iba a comprar estupefacientes. En ese momento, pese al imperante calor que hacía en ese momento, Bravo se encontraba buscando a sus animales, al fondo del barrio La Isla, cuando divisó a su “enemigo” cruzar por el lugar.
“Toro” Bravo interceptó a “Gringuito” Ruiz y comenzó a reclamarle el robo que su cuñada había sufrido en su casa del barrio Avenida. Ruiz habría ingresado al inmueble y le sustrajo un lavarropas, para luego huir. Pero apenas Carmen, la madre de Ruiz, descubrió el robo recuperó el artefacto y se dirigió a la propiedad de la damnificada, a quien se lo devolvió.
Pero la ira ya había sido sembrada en los cuñados de la damnificada; quienes comenzaron a hostigar a Ruiz a quien en reiteradas oportunidades le advirtieron que “lo iban a matar”.
Esa fatídica tarde, Ruiz mantuvo un cruce de palabras con Bravo. Se trenzaron en una lucha, donde “Gringuito” extrajo de entre sus pertenencias un cuchillo —arma blanca que siempre cargaba en su cintura— con el que intentó defenderse. De inmediato, sin temor a nada, Bravo sacó una tumbera —arma de fuego de fabricación casera— con la que él apuntó a su rival. Le disparó en la cabeza y el joven cayó malherido al suelo.
Ruiz fue abandonado en el lugar desangrándose, bajo el sol. Sus familiares fueron alertados de la situación por un vecino. Por lo que posteriormente arribaron al sitio y encontraron al personal del Sease 107 trasladando a la víctima hacia el CIS La Banda, donde finalmente murió.
Mientras que Bravo decidió huir hacia el río Dulce. El sospechoso fue detenido en la jornada del viernes por los efectivos de la División Homicidios y Delitos Complejos Banda quienes se encuentran abocados a las pesquisas de rigor por orden de la Justicia. Estaba oculto en una propiedad de calle Pedro León Gallo, en el barrio Sarmiento de la “Cuna de Poetas y Cantores”. Fue alojado en sede policial.
Con el supuesto autor del crimen detenido, los detectives continuaron trabajando rigurosamente con el fin de poder encontrar el arma homicida empleada durante el crimen de “Gringuito”.
Se realizaron múltiples allanamientos en diversos inmuebles de la vecina ciudad y un rastrillaje en la localidad de La Guarida —departamento Banda—. Sería el sitio hacia donde “Toro” Bravo escapó. Al costado del río, en el mismo lugar donde Bravo solía ir a sacar ripio, encontraron el arma homicida. Estaba abandonada entre las malezas y tendría restos de material genético que será analizado posteriormente. La “tumbera” fue ejecutada a escasos metros de Ruiz, por lo que la víctima sufrió graves lesiones que le costaron la vida.
De inmediato el personal de la División Policía Científica de Banda y Robles, a requerimiento de la Unidad Fiscal de Banda y Robles realizó los trabajos de fotografías y planimetrías en el lugar donde se encontró el arma. Además, se procedió a realizar el levantamiento de la misma, por orden judicial.
En marco de profundo dolor, despidieron los restos de Héctor “Gringuito” Ruiz
Entre muestras de pesar y lágrimas, los familiares y amigos de Héctor José Ruiz, le dieron el último adiós y sus restos fueron sepultados durante la mañana de ayer, en la ciudad de La Banda.
Ruiz falleció de un certero disparo en la cabeza, durante un incidente que mantuvo con Leandro Bravo quien se encuentra detenido. El cuerpo de la víctima fatal fue sometido a una autopsia, para posteriormente sus restos ser entregados a sus familiares para que realizaran la sepultura correspondiente.
Ayer, luego de un responso que se llevó a cabo en la casa donde Ruiz creció junto a sus tres hermanos y sus padres, en el barrio Avenida de La Banda; fue trasladado el cortejo fúnebre hasta el cementerio La Misericordia, de esa ciudad, donde se realizó un sentido homenaje entre sus seres cercanos y posteriormente, fue depositado el féretro en el lugar.
Los detectives buscan el cuchillo que tenía “Gringuito” en la pelea en medio de la calle
Los familiares de Ruiz como el testigo que brindó información en la investigación sobre el crimen de Héctor José Ruiz, indicaron que durante el incidente que le terminó costándole la vida.
Cada vez que salía de su vivienda, “Gringuito” cargaba en la cintura un cuchillo tipo carnicero de aproximadamente 30 centímetros de largo. El testigo indicó que durante la pelea que mantuvo la víctima fatal con Leandro Bravo, este habría sacado de entre sus pertenencias un elemento cortante.
Con el arma blanca habría intentado lesionar en varias oportunidades a Bravo, pero no pudo. Por lo que el homicida extrajo la tumbera, y lo asesinó de un disparo en la cabeza. En ese momento, el difunto habría arrojado el cuchillo.
Los efectivos de la División Homicidios y Delitos Complejos Banda, llevan a cabo una minuciosa investigación con el fin de poder secuestrar el arma blanca, que será una de las piezas fundamentales para la investigación. Por lo que se realizaron diversos rastrillajes donde se produjo el homicidio, pero con resultados negativos hasta el momento.
“Nosotros solo pedimos que se haga justicia por mi hermano, solo queremos que pague”
En medio del dolor por la pérdida irreparable de un ser querido, los hermanos de Héctor Ruiz y sus tíos pidieron que, “el responsable del brutal crimen del joven sea condenado por el atroz hecho”.
“Nosotros solo pedimos que se haga justicia por mi hermano, solo queremos que pague por lo que le hizo porque no se merecía esto. Esperamos que esta persona piense en su familia, en sus hermanos y sus hijos; que no quiera que le pase lo mismo, lo que hoy estamos sufriendo”, remarcó uno de los hermanos de Ruiz.
Al tiempo que agregó: “Mi hermano era una muy buena persona. Tenía problemas de adicción, pero nunca le hizo daño a nadie. Hoy dejó a sus hijos solos y a su madre destrozada. No sabemos ni cómo decirle a los hijos que no volverán a verlo nunca más, porque no está. Sentimos mucho dolor”.
