La lucha contra el narcotráfico y otros delitos federales es constante. No hay descanso y los uniformados están cada vez más alertas. En este sentido, personal del Escuadrón 59 Santiago del Estero de Gendarmería Nacional realizaba ayer controles de vehículos y personas sobre la Ruta Nacional 16, en inmediaciones de Monte Quemado, departamento Copo. En esa circunstancia, interceptaron una camioneta en la que se conducían dos hombres, quienes manifestaron que habían partido de Pichanal, Salta, y se dirigían hacia la citada ciudad del departamento Copo. Sin embargo, los efectivos advirtieron cierto nerviosismo en los ocupantes que no pasó desapercibido para los gendarmes, quienes realizaron una inspección externa del rodado y advirtieron que los cuatro neumáticos presentaban poca presión de aire.
Ante esta situación entró en acción “Dilan”, un perro detector de estupefacientes. A través de su fino olfato, el animal “indicó” a su guía la presencia de drogas en las ruedas.
En consecuencia, los efectivos desarmaron los cuatro neumáticos y determinaron que todos tenían en el interior una estructura de hierro que sujetaba “ladrillos” de cocaína. En total descubrieron 48 paquetes amarillos con 51,243 kilos de cocaína de alta pureza. El procedimiento fue informado al juez federal Nº 2 de Santiago del Estero, Dr. Sebastián Argibay, quien ordenó que los dos ocupantes de la camioneta quedaran detenidos e imputados por infracción a la Ley 23.737.
La carga está valuada en $ 500 millones y podría estar ligada a otros operativos
Los más de 51 kilos de cocaína secuestrados están valuados en más de 500 millones de pesos y se sospecha que iban a “enfriarlos” en Monte Quemado para seguir viaje a las grandes urbes del país. Los investigadores sostienen que los “ladrillos” amarillos podrían pertenecer a la misma banda que traficaba 63 kilos de cocaína en un camión con maderas para pallets, secuestrados el domingo último, y la “narcoambulancia” con 134 kilos, detectada el 8 de abril del corriente año.
