Un nene de tan solo cinco años fue internado en Chaco por un cuadro grave de intoxicación tras comer accidentalmente una “gomita” de LSD que su papá guardaba en la casa.
Según detallaron los medios locales, el chico estaba jugando cuando encontró la droga entre los equipos de música de su padre, un DJ de 45 años.
Al confundir la “gomita” con una golosina, el nene se la comió y enseguida sufrió una descompensación severa. Su hermana de 10 años, la única testigo del lamentable accidente, fue quien alertó en ese momento al padre y, probablemente, le salvó la vida.
El menor fue trasladado de urgencia al Hospital Pediátrico de Resistencia con síntomas que sugerían una intoxicación por sustancias psicoactivas, por lo que los médicos le realizaron un lavaje de estómago y quedó internado, pero fuera de peligro.
La intervención de la justicia
El caso es investigado por el fiscal Francisco De Obaldia, de la Fiscalía N°14, quien ordenó la intervención del personal de la Línea 102, un servicio especializado en la protección de los derechos de los niños.
Por otro lado, desde la Fiscalía se ordenó una investigación para determinar cómo la sustancia llegó a manos del menor y si existió algún tipo de negligencia por parte de los adultos responsables de su cuidado.
Este incidente puso en evidencia la importancia de mantener sustancias peligrosas fuera del alcance de los chicos, en especial aquellos que pueden ser confundidos con golosinas.