Saltar menú de navegación Teclas de acceso rápido
Policiales Exclusiva

"No daba de comer a sus hijitos y los bañaba con agua helada en el patio"

El pastor Jiménez, quien denunció a la incalificable madre por el caso que conmueve a la provincia, dialogó con Nuevo Diario y relató las aberraciones a las que eran sometidos los pequeños.

La vida que llevaron durante varios años cinco hermanos fue un verdadero calvario. Su madre, la mujer que debía cuidarlos y protegerlos con amor y compromiso, con el paso del tiempo se convirtió en su verdugo. Abandono, hostigamiento y constantes palizas, marcaron no solo la piel de los hermanitos, sino también su vida.

El sábado último, mientras estaban en un culto en una iglesia evangélica del barrio Santa Rosa de Lima de la Capital, la madre de 28 años residente en la zona llegó enfurecida. Estaba molesta porque los menores estaban castigados y habían concurrido al culto. Delante de los demás niños que asisten al lugar, la mujer comenzó a amenazarlos. Los insultó. Luego, los golpeó y les exigió que “se fueran a la casa”, mientras ella iba detrás de los hermanos a bordo de una motocicleta.

Al enterarse de la situación, el pastor Nicolás Jiménez le envió un mensaje a la mujer, en el que le advertía que “la iba a denunciar por maltratar a los menores”. Ella, enfurecida por la situación, sentó a los cinco niños y comenzó a decirles: “Ahora, por su culpa, Nicolás me va a denunciar y a ustedes los va a llevar la Policía a púberes. Ahí los van a maltratar y hasta los van a violar”. Los hermanitos, atemorizados, escuchaban a su madre. En ese momento llegó la Policía. La mujer fue trasladada a sede policial en calidad de aprehendida, mientras que los menores fueron trasladados a la comisaría y luego quedaron al cuidado de una tía y de sus abuelos paternos.

En diálogo con Nuevo Diario, Jiménez aseguró: “La vez pasada, porque lloraba y de castigo, al bebé no le dio la teta durante todo un día. Cuando les preguntaba a los chicos “qué habían comido”, contestaban que “nada porque su mamá no les cocinaba”. Contaron que “solo comían de noche. No les daba de comer”.

“Los chicos y los vecinos aseguran que cuando se molestaba con los menores por alguna travesura, los castigaba y los encerraba en la casa o no les deba de comer. No los dejaba ir a la iglesia, donde tenían comida, además de aprender sobre la Palabra de Dios”, manifestó el pastor.

Al tiempo que agregó: “Me contaron que cuando estaba en la comisaría, la abuela materna de los niños le decía a su nieto de 12 años: ‘si vos no quieres estar con tu madre, no metas a tus hermanos, vete vos. Vos no sirves’. Los chicos estaban con mucho miedo, temblando, porque pensaban que cuando ella quede libre, iba a volver y los iba a golpear nuevamente”.

Ayer, la imputada se abstuvo de declarar ante la fiscal Cecilia Gómez Castañeda, quein la acusó de maltratos físicos y psicológicos, en perjuicio de sus hijos. Mientras tanto, se dispuso una serie de medidas judiciales a seguir en las próximas horas. Los efectivos comenzaron a recibir declaraciones testimoniales a los testigos y además se realizará un informe socio-ambiental y vecinal.

“Tomó de las orejas a una de las niñas y la tiró al piso, golpeándola”, indicó el pastor

Entre los hechos de violencia doméstica que habrían sufrido los menores en manos de la detenida e imputada por la Justicia, se conoció que la mujer habría lesionado a una de sus hijas por una travesura.

A través de los vecinos que viven cerca de la casa de la denunciada, el pastor pudo saber que “una dificultad para caminar que había tenido la niña, era a causa de una golpiza de su madre”.

Al respecto, los menores solían realizar sus peticiones en el culto, para que su madre dejara de golpearlos.

En este marco, el pastor relató: “La semana pasada, tomó de las orejas a una de las niñas y le dijo el nombre a los gritos en la cara. Le decía, vos te llamas así, para luego arrojarla contra el suelo. La criatura estuvo tres días sin poder caminar”.

“Hoy les pido a los vecinos que se involucren y que declaren ante la Justicia, para que se haga justicia por los niños. Ellos siempre pedían en los cultos, en las cartitas que hacían, que su madre cambiara. Pedían a Dios que ‘su madre dejara de golpearlos’”.

Esta semana, los menores serán entrevistados por los psicólogos del Poder Judicial para conocer detalladamente los pormenores de los hechos de violencia que sufrieron.

Mientras, se define el futuro de los menores y de su madre.

 

“En invierno los bañaba a la intemperie, con agua helada”

Según indicaron los vecinos a Nuevo Diario, la detenida, de 28 años, en el barrio se mostraba como una persona amable y cariñosa con los hijos de sus vecinos, pero con sus propios hijos era fría y violenta.

Según manifestó el pastor Jiménez a Nuevo Diario, las criaturas habrían sufrido hechos de tortura por su madre. “En invierno, los chiquitos no se bañaban o si los bañaba, lo hacía con agua fría afuera de la casa. En invierno los bañaba a la intemperie con agua helada, en el patio, con tachos con agua fría y los dejaba ahí, desnudos”.

“Ellos (por las víctimas) contaban que cocinaban, ellos hacían fuego para cocinar teniendo cocina, porque su madre no los dejaba usarla. Ellos lavaban sus ropitas, porque si se ensuciaban les tiraba la ropa y no les lavaba”, sentenció el denunciante.

De acuerdo con lo manifestado por los testigos a Nuevo Diario, los menores habrían indicado en varias oportunidades que “entre ellos se ayudaban para lavar la ropa y preparar algo para comer cuando su madre no estaba”.

Tortura
Seguí a Nuevo Diario Web en google news
Comentarios

Te puede interesar

Teclas de acceso