Por las bajas temperaturas que se registraron ayer, una joven mamá ingresó a su casa un brasero con carbón encendido. Su hijo, de apenas 2 años, falleció tras sufrir una intoxicación por monóxido de carbono.
Eran las ocho de la noche del miércoles, cuando una mujer de 29 años hizo fuego y encendió el carbón en su vivienda ubicada en la calle Moreno, del barrio Independiente de la ciudad de Fernández –departamento Robles–.
La mujer duchó a su hijo de 2 años, lo abrigó y le dio de comer. Luego metió en la vivienda el carbón en un brasero, tomando los recaudos de siempre para evitar que se intoxicaran con monóxido. La mujer quiso calentar la habitación para que su hijo pudiera dormir tranquilo.
Eran aproximadamente las diez de la noche cuando cerró todo y se fue a dormir a su habitación junto a su hijo. Pero cerca de las 23.30, se percató de que el pequeño no reaccionaba. Se acercó a verlo y advirtió que estaba inconsciente.
De inmediato lo trasladó al hospital zonal de Fernández. Los profesionales de la salud que lo asistieron determinaron que el menor presentaba signos vitales bajos, por lo que intentaron estabilizarlo y lo derivaron de urgencia hacia el Centro Integral de Salud Banda. Sin embargo, desafortunadamente, el menor llegó allí sin signos vitales.
Los galenos le practicaron trabajos de reanimación, pero no lograron que reaccionara. Supieron que llevaba muerto algunos minutos. De inmediato, en el caso se dio intervención a la Fiscalía de Banda y Robles, a cargo de la Dra. Alejandra Holgado, que dispuso la autopsia del cuerpo y otras medidas a seguir.