Una joven mujer oriunda de Frías (Choya) que fue juzgada por estar acusada de ultrajar sexualmente a su sobrino (menor) fue hallada culpable por el tribunal que integraron los Dres. Julio Carmelo Vidal, Sara María Harón y Daniela Campos Nittinger, que la condenó a cumplir la pena de 10 años de prisión.
Los camaristas la consideraron autora material y penalmente responsable del delito de abuso sexual gravemente ultrajante agravado por la convivencia preexistente, ya que la víctima y su tía vivían en el mismo domicilio, lo cual era aprovechado por esta para consumar los abusos.
Durante la pandemia
Los hechos ocurrieron durante la pandemia por el Covid-19, y salieron a la luz cuando el menor le reveló los abusos a su madre y le manifestara la intención de que se radique una denuncia, por lo cual la progenitora así lo hizo. Según contó el niño, los ultrajes sexuales comenzaron cuando él tenía 9 años y se extendieron hasta los 12, indicando que todo comenzó con manoseos en sus partes íntimas, para después hacerlo víctima de prácticas sexuales inadecuadas para su edad.
Los alegatos finales
Las Dras. Natalia Simoes y Rocío Fringes, de la fiscalía, habían solicitado aplicar la pena de trece años de prisión a la inculpada, en tanto que la defensa técnica había solicitado dictar el sobreseimiento y conceder la libertad a la imputada.
El tribunal la condenó en un fallo unánime.
