El Gobierno reduce aranceles a la importación de ropa y calzado para frenar la inflación
El ministro de Economía, Luis Caputo, anunció una fuerte reducción de los aranceles de importación para ropa, calzado y telas, con el objetivo de aumentar la competencia y reducir los precios locales. A través de su cuenta en la red social X, el funcionario detalló que la medida se oficializará en los próximos días mediante un Decreto publicado en el Boletín Oficial.
Según lo comunicado, los aranceles para la ropa y el calzado se reducirán del 35% al 20%, mientras que los de telas bajarán del 26% al 18%, y los de hilados quedarán entre 12% y 16%, dependiendo del tipo. “Seguimos reduciendo impuestos y aranceles para fomentar la competencia y continuar bajando la inflación”, aseguró Caputo.
Rechazo del sector textil y de la UIA
Desde la industria textil manifestaron una fuerte oposición a la medida, argumentando que la baja de aranceles sin una reducción previa del "costo argentino" podría derivar en un “industricidio”. “Para bajar aranceles, primero hay que salir del cepo, reducir impuestos y aportes, y establecer un plan de estabilización”, señaló un referente del sector. Además, advirtieron que la falta de controles ya permite la importación de remeras a un dólar, por lo que consideran irrelevante la reducción de aranceles.
La Unión Industrial Argentina (UIA) también expresó su preocupación, señalando que la integración comercial debe ir acompañada de una agenda de competitividad interna. “Con los actuales niveles de presión fiscal, informalidad y falta de acceso al crédito, la competencia con importaciones de bienes finales se torna desigual y desleal”, afirmaron desde la entidad.
Los industriales también cuestionaron el argumento oficial de la inflación en el sector textil. Según la UIA, en enero el rubro textil registró un aumento del 0,6% y la indumentaria un 1%, mientras que en febrero la suba fue del 0,4%, menor a la de otros sectores de la economía. Asimismo, destacaron que el comercio ilegal y el contrabando afectan gravemente a la industria, con un 80% de las empresas del sector impactadas negativamente.
Impacto en el mercado
La medida del Gobierno podría generar una disminución en los precios de los productos importados, aunque su efecto en la industria local es incierto. Mientras el Ejecutivo defiende la apertura comercial como una vía para combatir la inflación y mejorar el acceso a bienes de consumo, los industriales advierten sobre las consecuencias para la producción nacional y el empleo.
En los próximos días, con la publicación del Decreto, se definirá el alcance final de la medida y su posible impacto en el mercado argentino.
