En un escenario de creciente malestar social y económico, la imagen del presidente Javier Milei registra una preocupante caída en Córdoba, provincia clave para el oficialismo. Dos encuestas recientes –realizadas por el Grupo Feedback y Pulso Social– revelan una baja de hasta 10 puntos en la aprobación del mandatario en la capital provincial en el último año, mientras crece el número de indecisos y se afianza el voto protesta.
Según el estudio del Grupo Feedback, la imagen positiva de Milei en Córdoba Capital descendió a 34,2%, con una caída de dos puntos en solo 30 días. Más preocupante aún, su imagen negativa subió a 31,9%, lo que, en palabras del encuestador Gastón Toro, enciende “luces rojas”, teniendo en cuenta que el libertario había alcanzado el 74% de los votos en esa ciudad durante las elecciones de 2023.
El relevamiento, realizado entre el 30 de junio y el 3 de julio sobre 1.125 casos presenciales, ubica a los indecisos como el grupo mayoritario, con un 25,7%, apenas por encima de La Libertad Avanza (25,6%), fuerza encabezada por Milei y Agustín Laje. Detrás aparecen Hacemos por Córdoba (15,3%), Unión por la Patria (8,3%), Juntos por el Cambio (5%), la izquierda (4,5%) y el Frente Renovador (3,8%). El voto en blanco o nulo suma un 11,8%, lo que eleva a más del 36% el total de votantes aún sin definición.
Por su parte, la encuesta de Pulso Social realizada entre el 27 de junio y el 2 de julio sobre 980 casos, refleja una baja de 6 puntos en la imagen positiva del presidente a nivel provincial (del 61% al 55%) y un aumento de 5 puntos en su imagen negativa (de 36% a 41%). Este deterioro se atribuye al desgaste provocado por escándalos como el caso “$Libra”, las inundaciones en Bahía Blanca y la falta de definiciones políticas sobre la Corte Suprema.
En materia económica, el estudio revela un fuerte desánimo: el 43% de los cordobeses considera que su situación personal empeoró en los últimos seis meses. Solo el 25% dice haber mejorado. Entre las preocupaciones principales se destacan los salarios bajos (40%), la pobreza (22%) y el desempleo (21%).
A nivel provincial, la gestión de Martín Llaryora mantiene una imagen positiva del 53%, mientras que el intendente capitalino Daniel Passerini alcanza el 50%. En tanto, el expresidente Juan Schiaretti continúa siendo el dirigente con mejor imagen en Córdoba: 61% positiva y 33% negativa.
En el plano electoral, La Libertad Avanza lidera con el 36% de intención de voto para las elecciones legislativas provinciales, seguido por el oficialismo cordobés (23%), el PJ nacional (13%), Juntos por el Cambio (8%) y la izquierda (3%). Sin embargo, los analistas advierten que el panorama es altamente volátil, y dependerá del armado territorial de LLA, el rol que juegue Schiaretti y el nivel de participación ciudadana en los comicios de octubre.
La caída sostenida en los niveles de aprobación presidencial y el aumento del desencanto social reflejan una alerta temprana para el Gobierno nacional en una de las provincias que supo ser su bastión electoral. La incertidumbre, tanto económica como política, domina el clima preelectoral cordobés.