
Cada 13 de junio se conmemora el Día Mundial del Cáncer de Piel, una jornada destinada a concientizar sobre la importancia de la prevención, el diagnóstico precoz y el cuidado frente a la exposición solar, principal factor de riesgo para este tipo de cáncer.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de 71.000 nuevos casos anuales de cáncer de piel no melanoma son detectados en el mundo. Además, se estima que la mitad de los tumores que se diagnostican globalmente son de origen cutáneo.
Desde la Dirección de Medicina Preventiva de la Provincia, se sumaron a la campaña de difusión con un claro mensaje: el 90% de los cánceres de piel podrían evitarse mediante la fotoprotección adecuada, controles médicos regulares y autoexploraciones.
“El cáncer de piel es uno de los pocos que pueden verse a simple vista. Estar atentos a los cambios en la piel y actuar a tiempo es fundamental para aumentar las posibilidades de curación”, destacaron desde el área de Salud.
Un diagnóstico temprano salva vidas
Aunque se trata de una enfermedad que genera preocupación, el cáncer de piel tiene un alto índice de curación si se detecta en etapas tempranas. De hecho, hasta un 95% de los casos pueden tratarse exitosamente si son diagnosticados a tiempo.
Factores de riesgo
Algunos de los principales factores que aumentan el riesgo de desarrollar cáncer de piel son:
-Piel clara.
-Antecedentes de quemaduras solares.
-Exposición excesiva al sol o en climas con alta radiación UV.
-Presencia de lunares o lesiones precancerosas.
-Antecedentes personales o familiares de cáncer de piel.
-Sistema inmunológico debilitado.
-Exposición a radiación o a sustancias químicas.
Recomendaciones de la OMS para prevenir el cáncer de piel
Con el objetivo de reducir los casos, la OMS recomienda seguir una serie de medidas preventivas:
-Evitar exponerse al sol entre las 11:00 y las 16:00.
-Preferir la sombra siempre que sea posible.
-Usar ropa protectora, como camisas de manga larga, sombreros y gafas de sol.
-Aplicar protector solar de amplio espectro, con factor adecuado, en las zonas no cubiertas.
-No utilizar protectores para prolongar el tiempo de exposición solar.
-Evitar las cabinas bronceadoras. Su uso antes de los 35 años aumenta un 75% el riesgo de melanoma maligno.
-Prohibir el uso de estos aparatos en menores de 18 años.
-Mantener a los bebés y niños pequeños alejados del sol directo.
-Realizar autoexámenes cutáneos regulares y ante cualquier duda, consultar a un dermatólogo.
Desde Medicina Preventiva enfatizan que el cuidado debe ser constante y consciente, ya que la sobreexposición solar acumulada desde la niñez es uno de los mayores detonantes de la enfermedad en la adultez.
“El cáncer de piel puede prevenirse y detectarse a tiempo. La clave está en la información, la protección y la consulta médica temprana”, concluyeron.