En 1906, Añatuya era apenas un puñado de familias dando origen a un pueblo, pero con la pretensión de progresar de la mano de la educación, veía nacer su primera escuela y la única en varios kilómetros a la redonda, en este lugar del Chaco santiagueño, inmensa extensión de territorio aún virgen en ese momento, que ofrecía generosa la madera de sus bosques de quebrachos para construir las vías férreas que se extendían por el dilatado país como símbolo de progreso.
Era entonces la escuela el único nexo entre estado y poblador y la herramienta de consolidación del sentimiento patrio, que muchos de los recién llegados al país recién comenzaban a desarrollar y transmitir a sus hijos, que eran la primera generación de argentinos de aquellos que llegaron de tan distantes lugares.
Rápidamente, el ferrocarril se convirtió en el eje vertebrador de este poblado, generando rápidamente progreso económico que hacía crecer el poblado, pero que ansiaba el establecimiento de una escuela que fuera la guía de sus hijos y los preparara de mejor manera para seguir fortaleciendo el fruto del trabajo de los sacrificados primeros pobladores.
Su inscripción inicial fue de 105, los que pronto aumentaron en número, hasta que el 17 de agosto de 1909 se inauguró su local propio.
La escuela mantuvo la categoría de Infantil desde 1906 hasta 1913, hasta que en el año 1914 pasó a ser Escuela Elemental hasta 1918, fecha en que se constituyó en Superior, contando ya con doce grados y dictándose clases de enseñanza especial en las ramas de labores, música, Trabajo manual y economía doméstica. Poseía además una biblioteca provista de gran cantidad de volúmenes.
El crecimiento de esta institución jamás se detuvo y el día 4 de mayo de 1951 se crea el "Jardines de Infantes", siendo su primera maestra jardinera la Sra. Argentina Banegas de Palavecino con una inscripción de 53 alumnos.
La Escuela Florentino Ameghino se convirtió en la casa de estudios más importante del Chaco santiagueño, ya que dio origen al colegio secundario Florentino Ameghino y fue cuna del Profesorado Elemental y el Profesorado Superior.
La escuela que hoy cumple 119 años, es la de mayor reconocimiento en la ciudad y su trayectoria sigue siendo la de marcar los rumbos de la educación publica en toda la zona, lo que se acredita con su dilatada trayectoria y frutos brindados.
• 1906 Escuela Infantil.
• 1914 Escuela Elemental.
• 1918 Escuela Superior.
• 1938 Creación de los Cursos Normales.
• 1941 Escuela Normal de Maestros.
• 1951 Creación de los Jardines de Infantes.
• 1970 Centro Experimental.
• 1971 Instituto Superior de Formación Docente.
• 1981 Profesorado Superior en Geografía y Ciencias Biológicas.
Hoy, el Centro Experimental cuenta con una población cercana a los 800 alumnos, en 28 secciones y además de un plantel docente y de maestranza, cuenta con la invalorable colaboración de una cooperadora escolar, inscripta en cooperativismo escolar del consejo general de educación, que brinda apoyo y acompañamiento a las actividades escolares, que no solo se evidencian en el diario dictado de clases, sino en la inserción social que tiene esta institución en toda la ciudad.
A fines del año 2024, fue inaugurado por el gobernador Gerardo Zamora un funcional y moderno edificio de vanguardia, pensado en las necesidades de los nuevos rumbos que necesita el sistema educativo.