En la parroquia Nuestra Señora de las Victorias de la ciudad Capital, se celebró una emotiva misa de acción de gracias presidida por José Luis Corral, obispo de la Diócesis de Añatuya, en conmemoración de la sesión de clausura del proceso diocesano de beatificación y canonización de monseñor Jorge Gottau, primer obispo de la diócesis.
La ceremonia contó con la co-celebración de monseñor Juan Liébana, obispo de Chascomús, junto a un grupo de sacerdotes que acompañaron este acto de fe y reconocimiento. Entre los presentes estuvieron peregrinos de la iglesia de Mailín–Cura Brochero de Añatuya, miembros de la familia antuliana y numerosos devotos del Siervo de Dios.
Durante la misa, se destacó la extensa labor pastoral, social y misionera de Jorge Gottau, un hombre que llevó adelante su misión en una diócesis que en sus comienzos contaba apenas con siete parroquias y siete sacerdotes. Su obra pionera incluyó la fundación del colegio San Alfonso, reflejando su compromiso con la educación como motor de progreso.
El obispo Juan Liébana recordó con emoción al Siervo de Dios como “un pastor con olor a oveja”, que amó profundamente a su pueblo y supo unir a sectores diversos para avanzar en su misión. La ceremonia marcó un paso fundamental en el camino hacia la santidad de monseñor Gottau, con la documentación oficial sellada y lista para ser enviada al Vaticano.
