La nieta 139, hija del matrimonio desaparecido conformado por Noemí Beatriz Macedo y Daniel Alfredo Inama, fue ayer restituida.
Ramón, su hermano, reconoció, en conferencia de prensa, que este fue “un acto de justicia, una reparación, una certeza”.
El equipo de Nuevo Diario se comunicó con Claudia Poblete Hlaczik, también nieta restituida e integrante de la comisión directiva de Abuelas de Plaza de Mayo. “Nos resulta muy emocionante, siempre, anunciar una nueva restitución de un nieto o una nieta”, celebró.
“Si bien una persona se está enterando de una verdad, muchas veces, dolorosa y en un marco de tragedia, es alguien más que puede decir, con certeza, quién es, y esa es la razón por la cual trabajamos todos los días”, indicó.
Los padres la nieta 139 fueron secuestrados el 2 de noviembre de 1977, en Recoleta, Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Ambos fueron vistos por sobrevivientes en el centro clandestino Club Atlético, perteneciente a la Policía Federal Argentina.
“Es muy importante porque muestra que esto es una realidad: todavía faltan muchísimas personas por conocer su verdadera identidad, que están ahí, muy cerca, en algún lugar, y que seguimos pudiendo encontrarlas, a pesar de todo lo que se intenta hacer para desacreditar a los organismos de derechos humanos y a la misma búsqueda”, sostuvo.
Poblete Hlaczik, hija de los desaparecidos Marta Gertrudis Hlaczik y José Liborio Poblete Roa, estimó que esta restitución permitirá que la nieta 139 tenga la posibilidad de conocer a sus padres, “saber que la quisieron”, y que tiene dos hermanos “que la esperan y con los cuales va a tener la chance de reconstruir ese vínculo que el terrorismo de Estado quiso cortar y que Abuelas, con su lucha y perseverancia, lograron volver a comenzar a construir desde el amor”.
