La provincia de Salta está marcada por el dolor tras la trágica muerte de Milagros Gutiérrez, una joven de 18 años que falleció este pasado jueves 13 de febrero bajo circunstancias que desataron una ola de indignación y reclamos de justicia.
Milagros fue víctima de una brutal golpiza que, según su familia, fue perpetrada por personas que buscaban silenciarla. La joven, en sus últimos momentos de vida, pudo identificar a sus agresores antes de ser ingresada al hospital San Bernardo con heridas graves.
Durante su internación, dentro del propio hospital, ocurrió algo más escalofriante: le habrían cortado la lengua para evitar que hablara sobre un abuso sexual del que presuntamente fue testigo.
La acción, de acuerdo con su familia, deterioró su salud rápidamente, dejándola incapaz de alimentarse y acelerando su muerte.
El velorio de Milagros, realizado en su barrio, Fraternidad, en la zona sudeste de Salta, estuvo marcado por el dolor de familiares y amigos que exigieron justicia, entre lágrimas y gritos desesperados. Esta mañana, cerca del mediodía, el ataúd de la joven fue cargado al coche fúnebre, y en la multitud se escucharon los clamores por esclarecer el crimen y hacer que los responsables paguen por su accionar.
Según Verónica, tía de la víctima, el ataque que sufrió Milagros fue un intento deliberado de silenciarla, ya que ella había sido testigo de una violación. "Le cortaron la lengua para que no hable", denunció la tía, quien también señaló que la joven había logrado identificar a sus agresores antes de ingresar al hospital, donde las condiciones de su internación empeoraron de manera alarmante.
La muerte de Milagros genera una profunda conmoción en Salta, con un creciente clamor popular por una investigación exhaustiva y la identificación de los responsables de su agresión y muerte. Las autoridades aún no brindaron una declaración oficial sobre el caso, pero la familia de Milagros continúa luchando para que su muerte no quede impune.
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