Un comerciante de 36 años, domiciliado en la zona oeste de la Capital, tomó conocimiento de que una de sus sobrinas había sido manoseada en sus partes íntimas. Se trata de una adolescente de 12 años que está bajo su cuidado, al igual que otros dos de sus hermanos menores, luego de que su madre adicta los abandonara. El hombre realizó averiguaciones en el vecindario y una de las habitantes de la zona habría observado una de las aberrantes situaciones cuando la menor se dirigía a realizar compras en un negocio de la zona. El acusado sería un vecino del comerciante, quien acostumbraría a seguir a la víctima para acosarla cada vez que sale, por lo general, al almacén. Tras la “investigación”, la menor le contó a su tío lo que había sufrido y acusó al sospechoso.
El comerciante realizó la denuncia en la Comisaría de la Mujer y la Familia Nº 11 y la Fiscalía ordenó medidas procesales.