Daniel Díaz era un peón rural de 62 años que vivía en la localidad de Argentina —departamento Aguirre—. Cayó en el interior de un pozo con agua cuando fue a buscar el líquido para sus animales. Su hijo se percató del accidente que el hombre sufrió.
Por lo que, Sebastián Díaz de 30 años decidió auxiliar a su padre. Pero desafortunadamente, terminó en el interior del pozo y sin poder salir. Padre e hijo fueron encontrados posteriormente flotando sin vida en el agua. Fueron rescatados por los Bomberos Voluntarios de Selva —departamento Rivadavia—. Sus cuerpos fueron sometidos a una autopsia a requerimiento de la Fiscalía de Añatuya, a cargo de la Dra. Andrea Darwich.
Ayer, luego de realizarse el examen médico forense, los restos de Daniel y de su hijo Sebastián fueron entregados a sus familiares para ser sepultados en la necrópolis local tras previo oficio religioso.
“Los vamos a extrañar siempre”, escribió en las redes sociales un familiar de las víctimas. Mientras que su vecino Andrés, posteó: “No entendemos qué pasó. En unos segundos se fueron dos excelentes personas. Hasta siempre”.