Un caso estremecedor causó conmoción en la localidad de Ensenada, donde una nena de apenas 2 años fue asesinada en medio de un ataque a tiros contra una casa ubicada en el barrio de El Dique, justo en el límite con La Plata.
Según fuentes de la investigación, el asesinato se produjo en el marco de una presunta estafa de venta de inmuebles y aprietes con tintes mafiosos.
El hecho ocurrió luego de que una banda encargada de la venta de inmuebles e investigada por reiteradas estafas, le había vendido una casa ubicada en las calles 50 y 123 a una familia oriunda de El Palihue, según pudo establecer el fiscal del caso, Juan Menucci.
La venta se llevó a cabo a cambio del pago de 2 millones de pesos y la familia pretendía mudarse ayer, martes, a falta de pagar una última cuota.
La banda que vendió el domicilio tenía la costumbre de hacer negocios con casas que estaban abandonadas u ocupadas ilegalmente y abandonadas. El modus operandi de ese grupo delictivo era vender los domicilios y, después de haber recibido el pago, acudir con una patota para desalojar a los residentes que habían pagado, según informó El Día.
En el caso de este domicilio en particular, la principal hipótesis que se maneja en la investigación es que, hace unas semanas, la banda engañó a la familia y ocupó la casa una vez que se había realizado la mayor parte del pago.
Carolina, abuela de Pía, la menor que resultó víctima fatal de esta disputa, relató cómo comenzó el confuso episodio y la disputa que terminó de la peor manera.
La mujer contó que llegaron a la casa a partir de una publicación en Facebook, en el que se la ofrecía en venta. Según detalló, la cobraron $2 millones.
“Habíamos pagado todo menos $180 mil, que cancelamos el lunes. Estuvo todo bien. Incluso la noche en la que le pagué y ella (la propietaria anterior) recibió la plata, todo normal”, apuntó.
El martes por la noche, cuando la familia quería instalarse en la casa, se desató la disputa con la gente que la estaba ocupando. “Yo tengo las llaves, las escrituras, todo”, dijo Carolina. “Cuando entramos estaban todos alcoholizados acá adentro”, expresó. “Tengo entendido que están desde hace como dos años”, detalló.
Al parecer, era la primera vez que se cruzaban, ya que la mujer contó que anteriormente ya se habían encontrado e incluso había acudido la Policía.
En medio de la discusión del martes, uno de los hombres agredió físicamente a Carolina, que está embarazada, y ahí fue cuando decidió dirigirse a la Comisaría 3ra. “Yo había grabado audios en los que esta gente nos amenazaba, pero el comisario se me rio en la cara”, apuntó.
“Cuando volví, habían matado a mi nieta”, se lamentó. “Pido que se haga justicia. Y que se tomen medidas contra el Jefe de la Comisaría, porque no actuaron bien”, reclamó.