
Escondiéndose en albergues o “donde la noche caía”, una mujer permaneció prófuga. Era buscada por abandono de persona y por corrupción de menores. Las víctimas: sus hijos.
Según se desprende de la investigación que fue realizada por la Fiscalía de Abuso Sexuales de la Capital, a cargo de la Dra. Florencia Torres Cianferoni, el caso salió a la luz luego de que la hija de 13 años de la mujer de 35 se descompensara y recibiera asistencia médica, donde reveló los abusos. La menor dijo que “su mamá sabía lo que los hombres hacían con ella y su hermano”. La menor habría deslizado que “su madre los entregaba a hombres”.
La Justicia y la Policía determinaron que, fehacientemente, los hermanos eran víctimas de constantes vejaciones por parte de sujetos. Dos de ellos fueron detenidos la semana pasada. Mientras que la mujer, tras conocer la noticia de las detenciones, se escapó. Pernoctaba donde podía, mientras escapaba de la Policía, recorría la ciudad de norte a sur. Los investigadores iniciaron una minuciosa investigación, donde se realizó un relevamiento vecinal y un informe socio-ambiental. Los efectivos determinaron que, fehacientemente, la madre sabía de los abusos sexuales a los que los menores eran sometidos por depravados. En ese momento, se desprendió una investigación con el fin de establecer cómo se llevaban a cabo los ataques a las víctimas. Los uniformados establecieron que la mujer tiene problemas de adicciones a las drogas y que no cuenta con antecedentes penales.
Es por ello que en la Cámara Gesell que se realizará en los próximos días, se tratará de dilucidar si la mujer “cambiaba” a sus hijos por drogas o dinero. En tanto, en los próximos días se llevará a cabo la declaración indagatoria a la imputada, por los delitos de abandono de persona y corrupción de menores.